viernes, 12 de febrero de 2010

La Fundación de Nogales

El momento de la fundación de Nogales, igual a como sucedió con la mayoría de las poblaciones, no ocurrió cuando llegó el primer poblador, lo que sería imposible determinar, ni tampoco cuando se establecieron ranchos, aduanas, estaciones u otra cosa en el lugar. El momento de la fundación de una población se reconoce como aquel en que es emitido un documento oficial que le da sustento jurídico a la nueva comunidad. Así pasó con la mayoría de las poblaciones de nuestro país, México, o con las de Estados Unidos o de cualquier lugar del mundo. 

La fecha reconocida como de la fundación de Hermosillo, por ejemplo, no fue cuando se estableciera una ranchería indígena allí, momento que no podríamos saber cuándo ocurrió, sino que Hermosillo fue fundado el 18 de mayo de 1700, día de la Santísima Trinidad, día en que el Alférez Juan Bautista Escalante llegó y visitó la ranchería indígena allí establecida, ordenando, además, que en el lugar “ahora y siempre vivirían en dicha ranchería y que harían pueblo en forma, agregando y llamando a otros de su misma nación, para que vivan juntos.”

Tucsón tampoco reconoce como la fecha de su fundación cuando se estableció la primera comunidad indígena en el lugar, que también sería imposible determinar ya que se encuentran asentamientos antiquísimos en ese valle que se remontan al Arcaico, ni tampoco se asigna su fundación a cuando el padre Kino visitara el lugar en 1697. El momento de la fundación de Tucsón, universalmente reconocido, ocurrió el 20 de agosto de 1775, día en que el Corl. Hugo O´Connor, después de visitar el lugar, firmó un documento en el que certificaba que: “elegí y señalé a presencia del Rdo. Padre Fr. Francisco Garcés y el Tte. Don Juan de Carmona para la nueva ubicación del referido Presidio y con la denominación de San Agustín del Toixon.”

Igualmente, y en el caso de Nogales, el momento de la fundación de esta población ocurrió al ser decretada la Ley No. 29 por el Congreso del Estado el 9 de julio de 1884, firmada por el Gobernador Luis E. Torres el día siguiente, y publicada el día 11, ley que erigía en municipalidad a Nogales.

Pero aún más, esta ley prevenía también la posesión jurídica, por el gobierno, del terreno de la nueva población de Nogales, ya que en su Artículo 2 facultaba al Gobernador del Estado “para que arregle” con los dueños del rancho Los Nogales, la adquisición del terreno necesario “para facilitar el progreso de la citada municipalidad.”

Para entonces, los dueños del terreno no eran únicamente miembros de la familia Elías, ya que ellos habían vendido secciones indivisas (es decir, áreas no definidas dentro de la posesión general) del terreno a otras personas. El principal condueño, aparte de los Elías, era Don José Camou, quien había adquirido en 1871 una importante parte del terreno, y el 11 de agosto de 1882 había denunciado las demasías del rancho (4,631.2 Has.), pero además se encontraba la pertenencia que le correspondía a Don José Pierson.

El terreno del Rancho Los Nogales, como hemos visto en artículos anteriores, y muestro en el mapa adjunto (que es interactivo, ya que puedes acercarte y alejarte, así como cambiar el tipo de mapa con los controles que aparecen en el mismo) abarcaba 7 y medio sitios de terreno con dos caballerías (equivalentes a 13,209.8 Has) y comprendía desde el actual Puerto de Encinas en Nogales, Sonora, hasta la confluencia de las actuales Ave. Grand con Mariposa en Nogales, Arizona, calles que, obviamente, no existían entonces y frontera internacional que tampoco había. Poco después la porción del terreno que quedó dentro del Territorio de Arizona, llevó a que José Camou reclamara ante las autoridades estadounidenses su posesión en la Unión Americana, pero ese será tema de un artículo posterior.

Así fue cómo nació nuestra población, convirtiéndose en unos cuantos meses en una de las poblaciones más pujantes en el Estado.  El 5 de Diciembre de ese año, 1884, los hermanos Próspero y Aurelio Sandoval, guaymenses, inauguraban la primera agencia aduanal nogalense. Este fue un momento emblemático que reconocía la vocación que este lugar había tenido desde tiempos inmemoriales y que le sería heredada a nuestra población: un lugar estratégico para realizar el comercio.

Al ser fundado el municipio quedaron comprendidos dentro de su jurisdicción, hacia el Este los ranchos de Santa Bárbara y Buenavista que todavía no adquiría Don Manuel Mascareñas, ya que él llegaría hasta 1885, y por el Oeste el rancho de La Arizona, de un bisabuelo del autor de estas líneas, así como los aledaños al mismo, minerales de Planchas de Plata, Pajarito, Promontorio, La Plomosa y El Durazno.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario